Esta modelo italiana no para de cautivarme. Sus largos cabellos oscuros en contraste de su tez clara le dan ese perfecto look Blancanieves, del perverso. Pero no se queda sólo en eso, ella juega, con su cuerpo, con sus ojos, con morisquetas que ni siquiera logran hacerla ver fea en esa foto. Cuando hace varios años tenía el cabello rubio y corto también me gustaba, pero seamos sinceros, el negro lo rockea absolutamente.
Y el motivo de esta entrada es que es la elegida para la cover de Vogue Italia del mes de octubre, fotografiada por Steven Meisel. ¿Y qué nos entrega? Una portada que uno bien podría confundir con una revista vintage. Y un edito exquisito, con la multifacética tana.
Disfruten! Y a ver si después pueden despegarse tan fácilmente de la pantalla. A mí no me resulta tan fácil.
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