Una de las películas animadas más exitosas y mejor elaboradas de los últimos tiempos, tuvo una nueva entrega. Y, si bien las secuelas suelen tenernos acostumbrados a lo peor, Toy Story 3 sea probablemente la mejor de las tres películas.
Si bien es una película infantil, es probable que mientras los niños sólo se divertían, reían y murmuraban 'qué tierno', nosotros los adultos nos hayamos visto un poco más tocados. Porque no podíamos evitar rememorar nuestra niñez perdida, aquella que a veces quisieramos mantener intacta.
Y sé que a más de uno se le derramó una lagrimita.
Pero no todo es mensaje, conmoción y recuerdos. La película funciona desde todos los aspectos. Los personajes tanto principales como secundarios están muy bien creados. La historia se desarrolla clara y livianamente. Y el final es perfecto. Cuando algo termina, otra cosa empieza. Y ni mencionar los diàlogos y la cantidad de gags buenos que tiene el film.
Insisto: estoy segura de que los adultos han sabido disfrutarla mucho más que los niños, que cuando sean más grandes la verán y ahí sí se les despertará lo que a nosotros.
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