El film tiene como protagonistas a cuatro amigos que durante su infancia reciben de manera casi mágica una caja de vinilos que luego los acompañarán durante toda su vida. Como la música. Que los acompaña y los mueve y los conecta.
Un locutor de radio que se enamora de mujeres imposibles, un guionista de cine fracasado que no puede escapar de una relación que terminó hace mucho, un músico frustrado que trabaja para una funeraria y está a punto de casarse, y un fanático de los Beatles que tiene su banda tributo a ella y vive obsesionado bajo la sombra de John Lennon.
Mientras ellos sufren amores y desamores, encuentros y desencuentros, traiciones y rupturas, su amistad perdura.
La película cuenta con un soundtrack de lujo para ser un film nacional y allí podemos suponer el esfuerzo que Nesci le puso a su trabajo, ya que además tuvo que lidiar para conseguir los derechos (que por supuesto algunos quedaron en el camino).
Pero la música en el film no sólo aparece como recurso estético, sino que tiene importancia en cada una de las historias que se cuentan. Porque uno tiene que sufrir escuchar en todos lados la canción poco alegre que le dedicó su ex, otro intenta agregar música a un trabajo que no tiene nada que ver, otro quiere y a la vez teme ser como John Lennon, y a otro le molesta que cuando conoce a alguien y le pregunta qué música escucha, ésta le conteste 'variado'.
Gracias también a las buenas actuaciones de cada protagonista, el humor y quizás hasta alguna escena un poco necesariamente trillada, ver esta película se termina convirtiendo en una muy agradable experiencia, que te hace salir de la sala con una sonrisa hermosa. Más que recomendada por quien les escribe.
1 comentarios:
Hay que ver, estoy con una deuda increible con el cine nacional ese ano solo mirando dos pelis ... Gracias por la recomendacion.
Publicar un comentario