Lady Gaga vino a la Argentina en el marco de su Born This Way Ball Tour y dio un concierto de dos horas y medias frente a un estadio que cantó, bailó, saltó y se emocionó. En un recital donde no faltaron ninguno de sus hits, Gaga también nos habló bastante (aunque nunca en español). Como suele demostrar siempre, alentó a cada uno ser como es, sin importar el qué dirán. Le regalaron una camiseta y un paquete de yerba (aunque parece nunca terminó de entender qué era y para qué servía). Prometió venir en cada gira que haga. Subió a unos pocos y privilegiados fans al escenario a cantar "My Hair". Tuvo muchos cambios de vestuario, se paseó por su castillo armado en el escenario y prometió que iba a ser la mejor noche de nuestras vidas. ¿Lo logró? No sé si tanto pero debo decir que superó mis expectativas.
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