Otra vez parece cantadísimo el voto. A la Academia le pasa, de repente se enamora de una actuación dramática (recordemos el de Anne Hathaway) por más que sólo se destaque unos pocos minutos.
Lupita Nyong'o por 12 years a slave. La actriz nacida en México debutó con esta película y parece haber encantado a la crítica hollywoodense. Si me preguntan, creo que durante toda la película pasa desapercibida hasta UNA, sí, sólo una escena en la que realmente sobresale del resto (la del jabón).
Julia Roberts por August Osage County. El film basado en la obra teatral prometía ser un desfile de buenas actuaciones, eso sí, se notaba que pensaban en el Oscar y no se equivocaron. Aún así,
el film me pareció muy malo (con muchas ganas de acentuar la no-teatralidad a base de recursos tan básicos como caprichosos planos exteriores generales), la historia aburrida y predecible y las actuaciones sobreactuadas. Una de las nominaciones que menos entiendo.
Jennifer Lawrence por American Hustle. La Academia y el público la ama, no hay dudas. Tampoco hay dudas de que Jennifer, haciendo de loca, obvio, qué mejor, sale muy bien parada con este elenco multiestelar (aunque nadie opaca a Amy Adams, pero en su post correspondiente me dedico a ella).
June Squibb por Nebraska. Una de las actuaciones más naturales, divertidas y conmovedoras, junto a la de su compañero Bruce Dern. Un personaje que empieza siendo duro y testarudo pero luego va mostrándose tal como es, como una señora que contrasta con la senilidad de su marido por ser la lúcida de la casa. Sin duda, de mis preferidas.
Sally Hawkins por Blue Jasmine. Se la quiere a Sally. Y que la hayan nominado me encanta, y es algo que no hubiera imaginado. Qué lindo sería verla alzarse con el Oscar... lamentablemente son pocas sus posibilidades.
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